viernes, 4 de mayo de 2012

Alessandro Volta





Alessandro Giuseppe Antonio Anastasio Volta (1745-1827). Alessandro Volta nació y fue educado en Como, Italia. Fue hijo de una madre noble y de un padre de la alta burguesía. Recibió una educación básica y media humanista, pero al llegar a la enseñanza superior, optó por una formación científica.
En el año 1774 fue nombrado profesor de física de la Escuela Real de Como. Un año después, Volta realizó su primer invento, un aparato relacionado con la electricidad. Con dos discos metálicos separados por un conductor húmedo, pero unidos con un circuito exterior. De esta forma logra por primera vez, producir corriente eléctrica continua, inventando el electróforo perpetuo, un dispositivo que una vez que se encuentra cargado, puede transferir electricidad a otros objetos, y que genera electricidad estática. Entre los años 1776 y 1778, se dedicó a la química, descubriendo y aislando el gas de metano. Un año más tarde, en 1779, fue nombrado profesor titular de la cátedra de física experimental en la universidad de Pavia.
En 1780, un amigo de Volta, Luigi Galvani, observó que el contacto de dos metales diferentes con el músculo de una rana originaba la aparición de corriente eléctrica. En 1794, a Volta le interesó la idea y comenzó a experimentar con metales únicamente, y llegó a la conclusión de que el tejido muscular animal no era necesario para producir corriente eléctrica. Este hallazgo suscitó una fuerte controversia entre los partidarios de la electricidad animal y los defensores de la electricidad metálica, pero la demostración, realizada en 1800, del funcionamiento de la primera pila eléctrica certificó la victoria del bando favorable a las tesis de Volta.Alessandro Volta comunicó su descubrimiento de la pila a la Royal Society londinense el 20 de marzo de 1800. La comunicación de Volta fue leída en audiencia el 26 de junio del mismo año, y tras varias reproducciones del invento efectuadas por los miembros de la sociedad, se confirmó el descubrimiento y se le otorgó el crédito de éste.
En septiembre de 1801, Volta viajó a París aceptando una invitación del emperador Napoleón Bonaparte, para exponer las características de su invento en el Instituto de Francia. El propio Bonaparte participó con entusiasmo en las exposiciones. El 2 de noviembre del mismo año, la comisión de científicos distinguidos por la  Academia de las Ciencias del Instituto de Francia encargados de evaluar el invento de Volta emitió el informe correspondiente aseverando su validez. Impresionado con la batería de Volta, el emperador lo nombró conde y senador del reino de Lombardía, y le otorgó la más alta distinción de la institución, la medalla de oro al mérito científico. El emperador de Austria, por su parte, lo designó director de la facultad de filosofía de la Universidad de Padúa en 1815.
Sus trabajos fueron publicados en cinco volúmenes en el año 1816, en Florencia. Los últimos años de vida los pasó en su hacienda en Camnago, cerca de Como, donde falleció el 5 de marzo de 1827.



Satélite Artificial

Un satélite artificial es una nave espacial fabricada en la Tierra o en otro lugar del espacio y enviada en un vehículo de lanzamiento, un tipo de cohete que envía una carga útil al espacio exterior. Los satélites artificiales pueden orbitar alrededor de lunas u objetos naturales del espacio, cometas, asteroides, planetas, estrellas o incluso galaxias. Tras su vida útil, los satélites artificiales pueden quedar orbitando como basura espacial. Los satélites artificiales nacieron durante la guerra fría entre los Estados Unidos y La Unión Soviética.

Cohete espacial

Un cohete espacial es una máquina que, utilizando un motor de combustión, produce la energía cinética necesaria para la expansión de los gases, que son lanzados a través de un tubo propulsor (llamada propulsión a reacción). Por extensión, el vehículo, generalmente espacial, que presenta motor de propulsión de este tipo es denominado cohete o misil. Normalmente, su objetivo es enviar artefactos (especialmente satélites artificiales y sondas espaciales) o naves espaciales y hombres al espacio (véase atmósfera).
Un cohete está formado por una estructura, un motor de propulsión a reacción y una carga útil. La estructura sirve para proteger los tanques de combustible y oxidante y la carga útil. Se llama también cohete al motor de propulsión en sí mismo.

Fuera del campo militar, el uso más importante de los cohetes es el de lanzar objetos al espacio exterior, normalmente poniéndolos en órbita en torno a la Tierra. Para este objetivo, el cohete es el único medio disponible. Por una parte, son los únicos vehículos capaces de alcanzar la velocidad necesaria para esta aplicación, y de la otra sólo el cohete es capaz de propulsarse en el vacío del espacio. Los otros vehículos necesitan un medio material sobre el que desplazarse, o bien obtienen algún elemento esencial para su funcionamiento del medio.
Sin embargo, el cohete no deja de ser un medio ineficaz de lanzar objetos al espacio. Debido a su propia naturaleza el cohete habrá siempre de ser mucho mayor que el objeto que tiene que transportar, y eso quiere decir que en un lanzamiento la mayor parte de la energía será utilizada para acelerar el propio cohete y no su carga útil. Por ejemplo, un cohete Ariane 5 cargado de combustible pesa en torno a 750 toneladas, de las cuales sólo 20 pueden ser efectivamente puestas en órbita. Sin embargo, no existen alternativas en el cohete ni a corto ni a largo plazo para esta aplicación.
Otro uso ligeramente diferente de los cohetes se encuentra en los estudios de microgravedad. Un cohete puede poner un objeto en una trayectoria balística fuera de la atmósfera, donde no será sometido a la fuerza de rozamiento del aire y estará, pues, en una situación de caída libre, equivalente a la ausencia de gravedad para muchos fenómenos físicos.
En razón del creciente desarrollo y la alta tecnología que involucra, no puede dejarse de lado la cohetería vocacional, conocida también como cohetería amateur.

Galera

La Galera es un barco impulsado por la fuerza de los remos, y en ocasiones por el viento; por eso poseía una o más velas grandes.
Era indudablemente en cuanto a su forma el eslabón entre la Navis longo romana , la galera de los siglos XV y XVI y los barcos de vapor. Muy semejantes sus condiciones respectivas en lo tocante a su ligereza, fue también muy semejante su destino en las armadas de tan distintas épocas sirviendo en todas ellas de naves auxiliares y exploratorias.
Las dimensiones de los mayores barcos de esta especie en las fechas últimamente citadas eran: eslora, 140 pies: manga, 20: puntal, 9. Hasta el siglo XVI en que se perfeccionó el uso de la artillería a bordo de las embarcaciones, iban armadas las galeras de un espolón a proa (el rostrum de la nave romana) hecho de bronce o de madera reforzado con zunchos de hierro y colocado muy bajo, casi en la línea de flotación con el objeto de desfondar el barco enemigo a quien embistiesen. Sobre la cubierta de la galera iban dispuestos a una y otra banda los bancos de los remeros existiendo una división, llamada crujía, que permitía ir de la popa a la proa: en este paso se colocaba el cómitre o nostromo (hortator entre los romanos) para vigilar y animar a los remeros.
Había galeras que llevaban uno, dos y tres palos variando según el tamaño así como en el número de remos desde la más pequeña que tenía 20 por banda hasta las cuatro galeras portuguesas que fueron con la Armada Invencible, cada una de las cuales contaba 306 remeros. La longitud de los remos era de unos 50 pies próximamente que se manejaban apoyando el primer tercio en las postizas o piezas rectangulares de madera adosadas por fuera de la embarcación, una por cada costado y que corrían a lo largo desde los yugos de popa hasta los del brazal o de proa. Las más antiguas galeras tenían las velas cuadrangulares, siendo la más grande la del trinquete, aunque después eran latinas y la vela del trinquete fue más pequeña que la del palo mayor. Unas veces, a imitación de las naves romanas, tenían parapetos en los costados, gruesas planchas o una serie de paveses o escudos que servían de abrigo en el combate a remeros y soldados; y otras, altos castillos a popa y a proa desde donde arrojaban las flechas, dardos y aun el fuego griego

Richard Trevithick





Richard Trevithick (1771-1833) fue un inventor, ingeniero y constructor de máquinas inglés. Desarrolló la primera locomotora de vapor capaz de funcionar.
Su padre era ingeniero de minas y trabajaba en la mina de Dolcoath. Asistió a la escuela en Camborne. A los 19 años se puso a trabajar en la mina East Stray Park, donde construyó y modificó máquinas de vapor.
A medida que adquiría experiencia, se iba ocupando de mejorar la máquina de vapor, especialmente el reducirla de tamaño y construir calderas potentes capaces de producir mayor presión y, por tanto, aumentar el rendimiento. En 1797 construyó Trevithick su primer modelo de vehículo a vapor.
En 1803 Trevithick construyó otro vehículo automóvil, el "London Steam Carriage", que en principio era una diligencia de correos provista de una máquina de vapor, que llamó la atención del público y la prensa, pero que en la práctica era más caro de mantener que un carro de caballos, por lo que no logró imponerse.
Revithick construyó en 1802 una máquina de alta presión para una planta siderúrgica en Merthyr Tydfil, Gales. La sujetó a un bastidor e hizo de ella una locomotora. La patente la vendió en 1803 a Samuel Homfray, el propietario de la ferrería.


En 1816 se fue al Perú, donde construyó bombas ligeras a vapor para el drenaje de las minas de plata a gran altura, las cuales se transportaban por piezas a lomo de mulas por senderos empinados. Adquirió derechos de prospección que prometían finalmente buenas ganancias, pero tuvo que renunciar a un cargamento de mineral por valor de 5000 libras esterlinas por los disturbios causados por la guerra civil, y en 1826 decidió salir de Sudamérica. En el puerto de Cartagena en Colombia se encontró con Robert Stephenson, quien le dio 50 libras para el pasaje. En 1827 regresó a Inglaterra totalmente falto de recursos. Volvió a trabajar en algunos proyectos pero enfermó de pulmonía y murió una semana después, el 22 de abril de 1833, en plena miseria y soledad.
Los restos de Richard Trevithick descansan en Dartford, Kent.

Goleta

Una goleta es un buque de dos o más mástiles (las ha habido hasta de siete palos), siendo el mayor el de mesana, con el aparejo formado por velas áuricas (cangreja, escandalosa) y velas de cuchillo (foques, velas de estay); es decir, velas dispuestas en el palo siguiendo la línea de crujía, de proa a popa, en vez de montadas en vergas transversales como las velas cuadradas.
La goleta aparece en el siglo XVIII y tiene características funcionales parecidas al bergantín, del que se diferencia principalmente por su aparejo. Es un buque capaz de alcanzar gran velocidad en ceñida y través, y se empleó de forma parecida al bergantín, aunque por su menor tamaño se destinaba más a actividades mercantes de cabotaje. El aparejo de cuchillo requiere menos personal para su manejo. Las goletas solían ser de menor desplazamiento que los bergantines, aunque también las hubo de más tonelaje, que se emplearon en navegación entre continentes, y en algún caso hasta de tres palos.
La goleta desaparece en el siglo XIX junto con la navegación a vela. Su aparejo tuvo gran influencia en las embarcaciones deportivas de vela actuales y en las construcciones modernas de grandes buques de vela, como buques escuela o para entretenimiento, que casi siempre emplean aparejos de tipo goleta o sus variantes.
Embarcaciones con variantes del aparejo de la goleta, además del bergantín-goleta (palo trinquete aparejado de cruz, p. ej. Juan Sebastián Elcano) son la goleta de velacho, con una o dos de tales velas en el trinquete (el palo más cercano a proa); goleta de gavias (trinquete con cangreja, escandalosa y gavias en mayor); goleta-polacra, mayor aparejado de goleta y trinquete con dos velas cuadradas y cangreja, sin cofas ni cruceta. Pailebot (vela de gavia baja en trinquete); queche, con los mismos aparejos, siendo el trinquete el palo mayor.

Bergantín

El Bergantín es un barco, generalmente de dos mástiles, con todo su aparejo formado por velas cuadradas; es decir, velas dispuestas en los mástiles colgando de velas transversales respecto al eje longitudinal de la nave (el que va desde la proa hasta la popa).
El bergantín aparece en la segunda parte del siglo XV y se empleó de forma generalizada hasta el siglo XIX. Se caracterizaba por la gran superficie vélica que era capaz de desplegar para su desplazamiento, de hasta 600 toneladas, siendo los bergantines buques extremadamente rápidos y ágiles en la maniobra, y apropiados para tráfico entre continentes.
Los bergantines fueron empleados como buques para tráfico mercante, pero también como corsarios, gracias a su gran velocidad, que les permitía escapar de navíos y fragatas, y alcanzar a toda clase de tráfico mercante. De esta forma las armadas incorporaron a su vez el bergantín, que portaba normalmente hasta una docena de piezas en cubierta, para exploración y lucha contra la piratería.
Este tipo de barco ayudó a explorar areas  inexploradas hasta entonces.